Título: Los ángeles de la salud
Hola soy Olga, hace 38 años trabajo en el hospital de tigre, entre joven a los 16 años, como mucama y me pagaba cooperadora, año 1986, mientras se habría la primer escuela de enfermería y empecé a estudiar por la tarde, me recibí a los 18 años, me nombro el ministerio de salud. Me acuerdo la alegría que me dio mi primer recibo de sueldo.
Al ser joven y nueva me pasaron por varios servicios, en esa época no había camilleros, entonces todo el trabajo pesado lo hacíamos solo las enfermeras. Por suerte ahora cambio, pero igual seguimos la mayoría teniendo problemas de columna. En los servicios que más tiempo estuve fue en el de clínica médica , trabajando con señores profesionales donde me enseñaban y por mi curiosidad aprendí mucho y me gustaba más ir por las buenas compañeras que tenía , armábamos un gran equipo donde los pacientes y nosotras estábamos cómodas , eran otras épocas, me acuerdo que en 1986 recién empezaban los primeros casos de HIV y se necesitaba más personal de enfermería capacitado porque antes se era enfermera empírica, hasta tuve una compañera que no sabía leer, se crio en un orfanato al cumplir su mayoría de edad, viene a trabajar al hospital y era una excelente enfermera que me enseño mucho y con cariño me cuidaba porque yo era la más chica.
Después pase por varios servicios, guardia, cirugía, obstetricia, que me encantaba y tenía a todos los bebes a upa cuando lloraban y las mamas con cesaría no podían, me acuerdo y me encontró ese paso en la maternidad puerperio.
En pediatría estuve poco porque no me gusta pinchar a los niños, lloro con ellos…
En el año 2015 nos cambiaron de hospital, un acto político que perjudico a la población porque teníamos un hospital con 200 camas, (cuando la población necesita 600 por la cantidad de habitantes que tiene) y nos pasaron a un hospital con 100 camas, luchamos con marchas, firmas, cortes de ruta, explicando a la gente como nos afectaba este recorte en salud.
A pesar de toda la lucha y todo el sacrificio que hicimos igual los políticos firmaron el traslado al hospital más chico, una tristeza de todo el personal, no solamente mía…
En medio del cambio se murió el director ejecutivo de ese momento y no estaba armada ninguna de las guardias en ninguno de los dos hospitales, igualmente lo atendieron en la guardia del viejo hospital y no pudieron en la guardia del viejo hospital y no pudieron resucitarlo… pero bueno tantas historias en el viejo hospital que todavía se extraña. La lucha en el nuevo nosocomio fue interna con los compañeros médicos por la falta de camas para internar a los pacientes de diferentes patologías.
Ah !! me olvidaba de contarles que en el viejo hospital varias veces nos agarraban las mareas y me toco estar dentro tres días, nos quedamos sin yerba y sin comida, justo paso un hombre en canoa y le pedimos que nos compre, por favor algo para comer y yerba para el mate, le tiramos la plata por la ventana, “ahora vuelvo “, nos dijo… y no volvió nunca más, el muy desgraciado. Y bueno así como esa hay un montón de anécdotas, algunas graciosas y otras tristes, como es la vida.
Y bueno lo último que les cuento es que en el 2021 después de pasar un año trabajando sin vacaciones y meses sola me , contagie civil , lo que me molesto es que cuando me internaron
en mi lugar de trabajo me reemplazaron tres compañeras , cuando me habían dejado meses reventándome sola …
Fue mi primer experiencia como paciente , un mes en terapia intensiva y dos semanas intubada con respirador , en otro planeta , muchas veces que me estaba entregando y no podía más , me moría , se me aparecía una luz azul a mi derecha , circular que giraba y me daba fuerzas para no rendirme , soy creyente pero no practicante , pero esto me cambio la vida , la veo distinta , agradecida y aunque putee y dije porque mierda me paso esto , ahora agradezco todos los días a dios por despertar un día más … también doy gracias a que me internaron en mi querido hospital porque mis compañeros excelentes profesionales me salvaron la vida , me dicen , es su trabajo , si seguro , pero yo solo sé cómo estaban todos muy cansados , muchas veces no los reconocía porque al estar todos tapados con el equipo de protección no sabía quiénes eran , a algunos los reconocía por la voz , a otros porque me decían quiénes eran , pero sí sé que todos eran angeles , que me cuidaron ; en el momento que estuve dormida , por el respirador , ( soñé o lo viví , estando en otro plano ) , que muchos de mis compañeros fallecidos estaban trabajando y los veía con los uniformes , muy serios , atendiéndonos , me alegraba verlos bien , seguramente ellos estaban ayudando .
Esa pandemia fue terrible en tantos años de trabajar como enfermera jamás vi algo así y más al estar del otro lado como paciente y ver lo necesario que somos . Fueron los que me cuidaron y me ayudaron, me alentaban poniéndome audios de mi hijo en el oído y dicen que yo saturaba mejor.
Ojala algún día realmente nos valoren, nos reconozcan como profesionales que somos y lo valiosos que somos para la comunidad de toda la salud pública.
Tres años pasaron y recién puedo decir que me estoy recuperando, me costó mucho salir a caminar con muchos dolores y miedos, pero ya paso y estoy viva y sigo siendo enfermera.
Roxana Silvero – Enfermera Hospital del Tigre. Gral. Pacheco Buenos Aires- Relato 15° Concurso Sin Presiones “Expresión escrita la salud de los trabajadorxs” Organizado por el Instituto de Salud Laboral y Medio Ambiente (ISLyMA) – Córdoba – 2024
El jurado expresó: Relato de vida en primera persona atravesada por la salud propia y por el sistema de salud. Trabajadora en hospitales que desguazan o trasladan personal para reducir gastos. Un relato homenaje a los y las trabajadoras de la salud en diferentes momentos históricos de nuestro país.